En cada culto o servicio que se realiza al menos una persona visita la iglesia por primera vez.  Al igual que  muchos de nosotros,  algún día realizamos una primera visita a una comunidad cristiana. Alguien nos invitó y tomamos la decisión de asistir.

Un saludo puede cambiar la vida de una persona. Por la Gracia de Dios, usted y yo somos instrumentos de Dios para cambiar vidas, con el poder de nuestro Señor Jesús.

Para el año 2016, puede ser que te interese agregar a tu lista de propósitos, saludar y bendecir a personas nuevas de la congregación. A continuación, te damos algunos puntos importantes que todos debemos tomar en cuenta:1

1. Interésese en la gente.
2. Seamos auténticos; seamos nosotros mismos.
3. Memoricemos y usemos los nombres de las personas.
4. Dediquemos tiempo, tanto al inicio como al final para saludar a las personas.
5. Sonría.
6. Cuando saludes a un invitado, exprésale una palabra de bendición, gratitud o un mensaje positivo.

Pudiera ser que saludamos a nuestros amigos y familiares, eso esta bien. Sin embargo, es muy importante saludar a personas invitadas. No olvide dar la bienvenida a personas invitadas. 🙂

Primero, agrademos a Dios y luego a alguna persona que Dios utilizó para permitirnos conocer a esa gran Familia de Dios. Recuerda que eres un instrumento de Dios. Con tu saludo cordial, puedes ayudar a muchas personas que dan sus primeros pasos en el evangelio.

En el nombre de Jesús, bendecimos este año 2016.

Nota del editor:

<Cuando comencé a asistir a esta congregación, Dios preparó y usó a una persona que “me dirigió” por un tiempo determinado. Esa persona fué como “un puente” para conocer hermanos y hermanas de La Cosecha. Agradezco mucho a Dios y a esa persona que fué un excelente “anfitrión”. Y por la Gracia  de Dios me permite servir en esta congregación. De Gracia recibimos, también demos de Gracia a otras personas.>

1. Artículo tomado y reditado del Boletín Informativo, 06 de enero, 2008,  Comunidad Cristiana La Cosecha.